Una reciente noticia en el telediario me dejó un tanto molesto. Habitualmente son muy prudentes en la forma de dar la información, por ejemplo, siempre califican de `presunto´, por ejemplo, `presunto ladrón´ o `presunto asesino´, a los sospechosos de un delito.

Hace unos días mencionaron un caso de un anciano que mató a su mujer, enferma de Alzheimer, y luego se suicidó. Agregaron que: `Con este, suman ya 63 [ó 64 o algo así] los casos de violencia de género en lo que va del año´. Esto me cayó mal pues en mi cabeza se había formado la imagen de una pareja de ancianos que ya no podían continuar viviendo. Habría sido lindo decir que `decidieron´ -ambos- terminar con sus vidas pero siendo que ella padecía Alzheimer, es difícil suponer que ella haya estado capacitada de tomar tal decisión y, por lo tanto, es reprochable que él hubiera tomado la decisión por ella. Lo que me incomodó fue la presunción de calificarla de `violencia de género´.

La eutanasia es actualmente ilegal y es atendible que haya enormes obstáculos para determinar los casos y condiciones en que pudiera ser válida, si correspondiere. El suicidio, si bien obviamente no puede penalizarse, siempre ha sido moralmente cuestionable. La historia y la literatura, sin embargo, nos ofrecen muchos casos que, si bien podemos no aprobar, al menos podemos entender.

No conociendo las circunstancias de este desdichados suceso, al menos hubiera preferido que no lo calificaran tan rotundamente como algo tan negativo. De la misma manera que a los sospechosos de un delito se lo califica de `presunto´, creo que los familiares y amigos que sobreviven a la pareja de ancianos habrían preferido que los noticieros hubieran sido más considerados con su memoria.